Hace algunos años, las marcas podían debatir y considerar la utilidad de estar en las redes sociales para decidir si era necesario o no hacer presencia en ellas. Hoy, nadie discute su importancia, y abrir un perfil en Facebook o Instagram, está dentro de las primeras tareas de mercadeo de cualquier empresa.

Sin embargo, no basta con abrirlas y publicar cualquier contenido. La verdadera gestión de redes sociales es un trabajo que requiere una inversión de tiempo considerable, no solo en la elaboración de los contenidos, sino en el encontrar oportunidades de crear valor a través de la interacción con los usuarios o con otras marcas.

¿Cómo gestionar efectivamente las redes sociales de tu empresa para que generen los resultados que deseas? En este artículo encontrarás 5 tips que te ayudarán a sacar el potencial de las redes para hacer crecer tu negocio de diferentes maneras.

1. Comienza por los objetivos:

Tu primer paso debe ser la creación de objetivos.

Tu gestión de redes sociales debe iniciar por definir qué deseas lograr con su apertura y manejo, esto lo logras definiendo uno o varios objetivos a cumplir.

Nuestra recomendación es que cada objetivo sea específico, medible, alcanzable, relevante y determinado en el tiempo. Además, es importante que a cada uno le asignes un indicador clave de desempeño (KPI), que es la medición que definirá el cumplimiento o no de los mismos.

Una vez tengas claro el o los objetivos de la gestión de tus redes sociales, estás listo para el siguiente tip, que te ayudará a que cada red social aporte a la consecución de tus metas.

2. Asigna un rol a cada red social:

Administra tus Redes sociales y dale un perfil a cada una de acuerdo a tu necesidad.

Todas las redes sociales son diferentes: no necesariamente tienen los mismos usuarios, tampoco interactúan de la misma manera, no responden a los mismos estímulos, ni acceden a su red social con la misma intención. 

Igualmente, el comportamiento de tu marca no deberá ser el mismo en todas las redes sociales. Según tus objetivos, tu marca deberá tener un accionar diferente en cada red, pero que ayude a sumar a su consecución.

La asignación de estos roles, te ayudará a entender de qué temas debe hablar tu marca en cada red, de qué manera debe hacerlo y en qué formatos puede ser más recomendable. Así, tu marca explotará los mejores atributos de cada red social que contribuyan a la consecución de tus objetivos.

3. Tus redes sociales no son unidireccionales

Las Redes sociales requieren de una interacción constante.

Tus redes sociales no son el tablón de anuncios de tu empresa. Es decir, no son un medio en el que solo tu marca habla, ni en los que deba ser siempre la protagonista.

Por su naturaleza, las redes sociales son medios de personas para las personas, interactuando sobre temas diferentes. Tu marca no puede ser ajena a esto y debe adoptar un comportamiento social que facilite la interacción.

Las redes sociales son un mecanismo excelente para entender de primera mano a tus clientes y prospectos: qué quieren, cómo lo quieren, por qué lo quieren, cuándo lo quieren etc. y esto solo se logra, dejando que tus usuarios tengan voz y participación.

Incentiva los comentarios, los mensajes y las actividades que generen interacción escrita u oral de tu público en relación con tu marca y utiliza cada momento de relacionamiento como una oportunidad para aprender más de ellos. Solo así, podrás proponer mejores acciones.

4. Ten siempre un manual de manejo de crisis

Tener un camino guiado en un momento de crisis puede ser tu mejor salvavidas para mantener el control.

Con la cantidad de conversaciones que suceden en internet cada segundo, alguien podría estar hablando negativamente sobre tu marca y tú no darte cuenta. Por eso es importante que tu marca esté siempre preparada para prevenir y afrontar cualquier crisis reputacional.

Utiliza herramientas de monitoreo para entender qué dicen sobre tu marca y aprovecha esta información bien sea para crear nuevos y mejores contenidos que impacten a la audiencia o para adelantarte a un posible caso de crisis. 

Si, aún así, tu marca llega a afrontar una crisis en redes sociales, debes contar con un manual que dicte el actuar de tu marca en cada posible caso, previniendo la improvisación y generando estrategias seguras ante casos que puedan manchar a uno de los activos más importantes de tu marca: su reputación.

5. Constancia vs. Relevancia

Generar contenido de relevancia para tu usuario.

Un error común de las marcas que inician a crear sus estrategias de redes sociales es pensar que por publicar constantemente, varias veces al día, van a obtener mejores resultados con su audiencia.

La verdad es que todo dependerá de tu tipo de negocio, de los hábitos de consumo de tus usuarios y de la capacidad que tenga tu marca para crear contenido relevante.

Si eres un medio noticioso, tal vez tenga mucho sentido que publiques múltiples veces al día; pero en la mayoría de ocasiones, será más estratégico publicar en menor cantidad, pero con mayor calidad. Así mantienes la relevancia de tu marca y concentras tus recursos únicamente en publicaciones clave.

Definir la frecuencia de publicación de tu marca no es una ciencia exacta. Ten en cuenta que es un proceso de prueba y error en el que, según la data que tus mismas redes arrojen, podrás tomar decisiones de ajustes y de cómo llegar de manera más efectiva a tus públicos.

Por:

SM Digital.

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